no creo haber jugado un mal partido

rey del polvo de ladrillo, Rafael Nadal, el sueco Soderling escribió una nueva pági- na de su curioso libro de destrucciones, le devolvió el favor al español ...
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MIÉRCOLES 2 Y 06 Y 2010

TENIS: ROLAND GARROS

POR MAXIMILIANO BOSO ENVIADO ESPECIAL

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ARIS.– A los que cargaban la bandera que decía “Shhh, genio trabajando”, Robin Soderling les asestó un sablazo. A aquellos otros que había traído especialmente una que decía “Acabamos de llegar de Polonia para admirar a Roger”, Soderling les lanzó uno de sus misiles. Al público francés que adora a Roger Federer, a quien aplaudió más que al ganador en la salida, Soderling le arrojó munición gruesa con su derecha de fuego, con sus inversiones en la cancha hasta lo absurdo. Con la misma fiereza con la que hace un año sacó de aquí con la cabeza baja al mismísimo rey del polvo de ladrillo, Rafael Nadal, el sueco Soderling escribió una nueva página de su curioso libro de destrucciones, le devolvió el favor al español quitándole a Federer del camino ayer con una rotunda victoria y abriéndole un sendero a Nadal para que el mallorquín tenga la posibilidad no sólo de reconquistar el título en la tierra que más fama le dio, sino que la corona, de llegar, lo hará también cargada con los laureles del N° 1 del mundo. Con una magnífica tarea, digna de un gladiador de esos que tienen al enemigo entre ceja y ceja, que no le sacan la vista ni cuando se escabulle en el bosque, Soderling hizo caer a Federer con estruendo, al vencerlo por 3-6, 6-3, 7-5 y 6-4 en dos horas y media de juego neto, que se vieron interrumpidas dos veces por la lluvia. Las estadísticas estaban listas y relucientes. Los récords del suizo se preparaban para salir nuevamente a la luz, como tantas veces, como ante cada nueva marca. Porque si ganaba, Federer se aseguraba seguir como N° 1 tras el torneo, sumar su semana 286 en esa condición privilegiada y alcanzar el récord de Sampras. Pero el que se frota las manos ahora es Nadal, que si suma su quinto título aquí volverá al trono y dejará a Federer con 285 semanas al frente del ranking. “Este es mi Grand Slam favorito”, dijo Soderling recién consumada su obra. Como para no decirlo cuando éste ha sido el lugar en el que encontró su medida, después de tanto espíritu tirado en jornadas de inconsistencia e irregularidad. Incluso, ese lugar parece ser preciso: el estadio Philippe Chatrier. En él se cargó el año pasado al entonces número 1 del mundo Nadal. En él ametralló esta vez al número 1 actual, Federer. Entonces, fue el principio del fin del reinado del español. Esta vez puede ser el cierre de la segunda etapa del suizo al tope de la lista. No se encontrará en las estadísticas una razón clara para la victoria del sueco, que apenas ganó tres puntos más que el suizo. Seguramente los cuatro break points concretados contra los dos de Federer. Y no más. Es que hay partidos que no se ganan con las estadísticas. Se ganan con coraje, con atrevimiento, con decisión, con cabeza. Cuando Federer agacha la cabeza seguido significa que algo no anda bien. Cuando Soderling mira fijo a los ojos del adversario aún estando debajo en el marcador, algo serio puede pasar. Federer encontró muy pocas veces su

timming. Jugó con ese gesto que pocos rivales disfrutaron, algunos pocos elegidos, los que le ganaron. Con ese rostro sombrío que pone normalmente cuando enfrente está Rafael Nadal, que advierte que hay una tormenta en los alrededores del estadio. El agua llegó y justamente para amargar al número 1 del mundo, que sufrió quiebres luego de cada interrupción. Al suizo, que venía de perder el segundo set, no le gustó nada la lluvia cuando estaban 5-5 y 30-15 con su saque en el tercero. Se fue molesto, quizá no tanto con la lluvia como sí con los tres sets points que no pudo aprovechar en el 5-4 y saque de Soderling. Con la lluvia, no fueron pocos los que pensaron y dijeron en voz alta: “Alguna vez le tenía que tocar”. Federer suele zafar de este tipo de situaciones. Desde su imagen impecable y su charme, hasta no parece hecho para el barro. Su desesperación fue evidente como pocas veces cuando, con set point en contra, una derecha en los límites de Federer fue marcada como buena por el umpire Enric Molina. Soderling se rió. El punto se repitió. Ace de Soderling y hasta luego. Federer abrió los brazos, como diciendo: “No puede ser, así es imposible”. Durante toda la tarde, Soderling machacó con ese látigo que tiene por drive. El brazo atrás, casi estirado, y la cara bien abierta de la raqueta para descerrajar esos planazos letales, abiertos, contundentes, demoledores. El sueco se invirtió hasta salirse de la cancha con tal de darle y darle con su brazo derecho ante un Federer que no podía más que defenderse todo lo humanamente (sí, es humano, está claro) posible. A veces, da la sensación de que un día a Soderling se le saldrá el hombro de lugar.

El gesto de impotencia de Federer, que no pudo defender el título en París

NADAL, CON LOS JUNIORS ARGENTINOS

En el cuarto set, Federer quebró para adelantarse 2-0. Pero fue como esconderse detrás de un árbol en medio de la guerra. Lo de Soderling fue sólo un respiro. Volvió más fiero que nunca, más desafiante que antes, más certero. Recuperó enseguida la desventaja. Y el padre de Federer, Robert, en la tribuna captaba la situación: su cabeza se movía en sentido negativo. Bastó una breve interrupción de cuatro minutos en el cuarto set, mientras que en el estadio Suzanne Lenglen Tomas Berdych y Mikhail Youzhny seguían jugando. Porque en París pasan estas cosas, que mientras en una cancha diluvia, en la otra llueve apenas. Cuando volvieron, los peores temores de Federer se hicieron carne. Soderling quebró para 5-4 y saque. El temor se sintió en todo el estadio. Y Federer cayó. Soderling derrotó por primera vez a Federer en 13 partidos. Es que el sueco, con esa mirada desafiante y agresiva, con el puño, le dice a todo el mundo que no cree en números malditos: el diablo es él...

EL CAMINO AL TÍTULO Caballeros Cuartos de final

Semifinal

R.FEDERER (Suiza, 1º) R. SODERLING (Suecia, 5º)

3-6, 6-3, 7-5 y 6-4

T. BERDYCH (R. Checa, 15º) 6-3, 6-1 y 6-2 M. YOUZHNY (Rusia, 11º)

R. SODERLING T. BERDYCH

J. MELZER (Austria, 22º) N. DJOKOVIC (Serbia, 3º) N. ALMAGRO (España, 19º) R. NADAL (España, 2º)

Damas Cuartos de final

Semifinal

S. WILLIAMS (EE.UU, 1 ) S. STOSUR (Australia, 7a) a

J. JANKOVIC (Serbia, 4a) Y. SHVEDOVA (Kazajistán, 7a) F. SCHIAVONE (Italia, 17a) 6-2 y 6-3 C. WOZNIACKI (Dinamarca, 3a) E. DEMENTIEVA (Rusia, 5a) N. PETROVA (Rusia, 19a)

2-6, 6-2 y 6-0

F. SCHIAVONE E. DEMENTIEVA

HOY, ANTE EL ESPAÑOL ALMAGRO

NADAL Y SUS PRETENSIONES PARIS (De un enviado especial).– El español Rafael Nadal, el principal beneficiado, al margen de Robin Soderling, de la derrota de Roger Federer, se medirá hoy con su compatriota Nicolás Almagro (19°), en busca del posible N° 1 del mundo, si gana el torneo francés. Sin embargo, si Nadal pierde hoy ante Almagro, Federer se mantendría y Novak Djokovic (3ero) le arrebataría la segunda colocación al español, algo que también podría suceder si el serbio derrotara a Nadal en una posible semifinal. La derecha de Soderling, un mortero que le tocó padecer a Federer

Rafael Nadal se entrenó ayer por segunda vez en el torneo con un junior argentino, en este caso el hermano de Guillermo Coria, Federico, que no pudo superar la clasificación para el torneo, pero igual se quedó por aquí. Nadal también peloteó con Facundo Argüello, que está en los octavos de final.

// REUT E RS

El gesto ganador de un gladiador; Soderling escribe otra página de su particular historia al vencer a Federer // R EU T E RS

SCHIAVONE HACE HISTORIA La italiana Francesca Schiavone besó el polvo de ladrillo del estadio Philippe Chatrier al hacer historia para su país ayer, con su victoria ante la dinamarquesa Caroline Wozniacki (3era favorita) por 6-2 y 6-3 y transformarse así en la primera jugadora italiana en alcanzar una semifinal de Grand Slam en la era abierta. La última había sido Silvana Lazzarini en este mismo sitio, en 1954. Schiavone se medirá mañana con la rusa Elena Dementieva (5ª), que superó ayer a su compatriota Nadia Petrova (19ª) por 2-6, 6-2 y 6-0.

ROBIN SODERLING VUELVE A ESTREMECER A PARIS: BATIÓ A ROGER FEDERER; EL SUECO, QUE AYER GANÓ EN CUATRO SETS, EL AÑO PASADO HABÍA DERROTADO A RAFAEL NADAL,

EL

DESTRU UCTOR QUIEN AHORA TIENE EL CAMINO ALLANADO RUMBO AL N° 1

“NO CREO HABER JUGADO UN MAL PARTIDO” LA DESILUSIÓN DE FEDERER; “¿SI ALGUIEN LE PEGA TAN FUERTE COMO SODERLING? SÍ, DEL POTRO”, DIJO

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ARIS (De un enviado especial).– No sucede habitualmente que Roger Federer tarde dos horas en llegar a la conferencia de prensa. Claro, no sucede habitualmente que pierda en los cuartos de final de un Grand Slam. La última vez que el suizo no llegó a los cuartos de final de un torneo de este tipo fue en este mismo certamen, en 2004, el gran año argentino, cuando cayó frente a Gustavo Kuerten en la tercera rueda. Ni rastros de su estilo. Remera polo desteñida en tono gris con el cuello levantado, gorrita celeste con sus iniciales, pantalón jogging gris claro. Ni una sonrisa. Y hablando repetidas veces de las malas condiciones de juego. –Contá un poco cuáles son tus sensaciones. –Desilusionado. No creo que haya jugado un mal partido. Las condiciones fueron difíciles para los dos y él jugó un gran tenis. Es algo más fácil digerirlo de esta manera. –Tuviste set points antes del primer parate. ¿Pudo haber sido otra la historia? –Bueno, sí, en un partido a cinco sets uno siempre tiene chances y yo tuve las mías. Fue duro perder ese set. –¿Qué significa que se haya cortado tu récord de semifinales seguidas? –Todas las marcas llegan al final alguna vez. Uno espera que no, pero sucede. Fue un récord enorme, pero ahora tengo el récord de cuartos de final, supongo (provocó risas, pero él no perdió la seriedad). –A Robin le habías ganado las 12 veces que jugaron. ¿Qué cambió esta vez? –El jugó en un gran nivel durante prácticamente todo el partido. Y no culpo a las condiciones ni nada, pero creo que al final lo favorecieron. Fueron condiciones duras. Cuando sacás a 225 o 230 kilómetros por hora, todavía podés manejar el servicio. Yo no saco tan fuerte como él. La verdad que es que es una pena, porque perdí tres partidos este año en clay con lluvia: en Estoril, Roma y aquí. –¿Pensabas que podías perder? –Respeto a todos, pero soy lo suficientemente honesto conmigo como para saber que les puedo ganar a todos. Si hubiera estado sólido, probablemente hubiera ganado el partido. –¿Qué es lo peor: no haber podido ganar otro Grand Slam o haber

dejado la puerta abierta para perder el número 1? –Uno toma la derrota como viene, no piensa en las consecuencias. Lo que más me desilusiona es no poder defender mi título acá. Realmente sentía que tenía el tenis para repetir. Entonces, es peor no haber podido hacer mi mejor tenis, por las condiciones y el rival. Después nos vamos al césped y uno se olvida un poquito. –¿Creés que Soderling puede ser campeón esta vez? –Claro, cuando estás en semifinales son sólo cuatro y todos pueden hacerlo. Llegó a la final el año pasado y creo que si repite este año se va a sentir más cómodo. –¿Alguna vez jugaste contra un tenista que le pegara tan fuerte a la pelota? –Sí. –¿Quién? –Del Potro. Se olvidan de él porque está lesionado.

EN JUVENILES

VELOTTI Y ARGÜELLO AVANZAN A OCTAVOS PARIS (De un enviado especial).– Agustín Velotti y Facundo Argüello ganaron sus choques de ayer y se sumaron a Renzo Olivo en los octavos de final de la versión junior de Roland Garros. Lo propio hizo Andrea Collarini, el chico que ahora representa a los Estados Unidos. Velotti superó al norteamericano Junior Ore por un doble 6-2, mientras que Argüello sólo cedió un game más en su triunfo ante otro estadounidense, Dane Webb, por 6-3 y 6-2. En tanto, Collarini dejó en el camino al sueco Tobias Blomgren por 6-0 y 6-1. En los encuentros de la segunda rueda de dobles, Argüello y Velotti les ganaron a los brasileños Guilherme Clezar y Tiago Fernandes por 2-6, 6-4 y 12-10 (match tie break). En cambio, perdieron Renzo Olivo y el neozelandés Sebastian Lavie ante los rusos Victor Baluda y Mikhail Biryukov por 6-4 y 6-3, y también Agustina Sol Eskenazi y la montenegrina Danka Kovinic frente a la húngara Timea Babos y la norteamericana Sloane Stephens por 6-3 y 6-0. Andrea Collarini y el norteamericano Denis Kudla perdieron con el británico Oliver Golding y el ruso Alexander Rumyantsev por 6-1, 6-7 (4-7) y 10-2.