New Title

ría en absoluto el acabose para Europa. Es más, según él, el fin de la moneda única, para España y el resto de países con problemas financieros, supondría. “la mejor manera de gestionar los des- fases” que “tanto complican la recupe- ración económica” del viejo continente. “Hay divergencias en Europa, en térmi-.
86KB Größe 10 Downloads 97 vistas
ECONOMÍA

Desmontando el euro Un exdirectivo del Bundesbank afirma en un polémico libro que la desaparición del euro ayudaría a salir de la crisis a los países del sur de Europa.

Por Salvador Martínez (Berlín)

no hace tanto tiempo la idea de acabar con el euro era todo un tabú. Pero comentar las causas y consecuencias de una eventual ruptura de la moneda única se está popularizando, y no solo en selectas esferas intelectuales. Prueba de ello es el éxito en Alemania del último libro del polémico autor y exdirectivo del Bundesbank Thilo Sarrazin. Su segundo superventas, Europa braucht den Euro Nicht (Editorial DVA 2012), plantea, de hecho, que “Europa no necesita el euro”. Para Sarrazin, romper el euro no sería en absoluto el acabose para Europa. Es más, según él, el fin de la moneda única, para España y el resto de países con problemas financieros, supondría “la mejor manera de gestionar los desfases” que “tanto complican la recuperación económica” del viejo continente. “Hay divergencias en Europa, en términos de precios y costes, similares a los de los años 70, 80 y 90. Pero ahora, con la moneda única, España, Italia y Francia no tienen posibilidad alguna de modificar el tipo de cambio de sus monedas. Si estuviéramos a principios de los 90, sin el euro, mi conclusión sería que Francia debería devaluar su moneda un 25%; Italia, un 30% o un 35%; España, más o menos igual; y Grecia, al menos un 40% o un 50%”, explica Sarrazin a Tiempo. Esas modificaciones del tipo de cambio permitirían a las economías del sur europeo, las más afectadas por la crisis de la deuda, ganar competitividad y ahorrarse parte del sufrimiento que suponen las actuales devaluaciones internas basadas en podas presupuestarias y drásticas rebajas de los estándares sociolaborales.

rían más rápido y sus importaciones se reducirían por el consiguiente aumento de su precio”, sostiene Sarrazin, que ve en la eventual recuperación de la peseta una salida para lidiar con la funesta herencia del boom de la construcción. “Sería más fácil lidiar con el lastre inmobiliario, porque el precio de las casas sería más competitivo y atraería compradores del Reino Unido o de Alemania, porque las casas españolas serían más baratas”, apunta el autor de Europa braucht den Euro Nicht. No se olvida Sarrazin de que el turismo español, enfrentado al de otros países mediterráneos más baratos y que no están en el euro, como Turquía, ganaría músculo con una nueva peseta devaluada. Gracias a ella, “al final, la economía española crecería más fácilmente que ahora”, sostiene. Es consciente Sarrazin de las “severas consecuencias” que a corto plazo ten-

dría una ruptura de la Eurozona. Pero entiende que acabar con la moneda única bien puede merecer la pena, puesto que “el euro no ha servido de nada para los países del Norte y ha hecho más daño que aportado beneficios a los del Sur”. Para Alemania, por ejemplo, recuperar una nueva versión del marco supondría una importante valorización de esa moneda, que traería dificultades a parte de la industria exportadora, la clave del poderío económico alemán. El exdirectivo del Bundesbank lo sabe, pero prefiere pensar que la economía germana “seguiría vendiendo productos químicos, coches, y maquinaria”, señala. Además, “Alemania ya no tendría el lastre de los riesgos asumidos a largo plazo con la Eurozona, que se está estancando, y el riesgo creciente que supone apoyar al sur de Europa. Esto es, a largo plazo, más peligroso que la apreciación de la moneda”, añade.

Sin apoyos.

Contra el lastre inmobiliario.

Según el economista, el turismo español ganaría músculo con una nueva peseta devaluada

CarstEn Koall/GEtty ImaGEs

“Si España fuera capaz de devaluar su moneda, la mano de obra sería aún más barata. Sus exportaciones crece-

Controversia. “Europa no necesita el euro” es el título del nuevo y controvertido libro de Sarrazin.

Habida cuenta de las innumerables declaraciones hechas por la canciller Angela Merkel sobre su compromiso con la continuidad del euro, las ideas de Sarrazin no tienen respaldo en la clase dirigente alemana. Cuando Sarrazin publicó en 2010 su anterior libro, Deutchsland Schaft Sich Ab (“Alemania se disuelve”), uno de los superventas que más ha conmocionado al país, habida cuenta de sus tintes xenófobos, Merkel se refirió a los escritos del economista como “estúpidas afirmaciones simplistas e histriónicas”. Pero poco después de hacer esa afirmación, en vista del popular debate generado por el entonces directivo del Bundesbank, la canciller denunció el “fracaso” del multiculturalismo alemán. Por suerte para el euro, un cambio de orientación alemán de esas características no parece estar en la agenda de Merkel. Ni en la de los dirigentes de los países del sur europeo, por mucho que sufran por permanecer en la Eurozona debido a la crisis. Superar el tormento que sufren países como España es posible, “pero solo pagando un precio político y económico enorme”, concluye Sarrazin. Mariano Rajoy y su Gobierno pueden darse por advertidos. 25 de enero de 2013 tiempo 45