LUCAS 19:11-27 IDEA CENTRAL: Cuando Cristo regrese ... - ObreroFiel

Todo depende del servicio fiel que le rendimos ahora. Por Gary Williams. Usado con permiso. ObreroFiel.com – Se permite reproducir este material siempre y ...
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LUCAS 19:11-27 IDEA CENTRAL: Cuando Cristo regrese él nos evaluará y recompensará conforme hemos utilizado lo que él nos ha dado para servirlo. INTRODUCCIÓN. La Biblia nos ofrece varias motivaciones para servir al Señor, incluyendo la grandeza de Dios, lo que Dios ha hecho por nosotros, el ejemplo de servicio sacrificial de parte de Cristo y las recompensas divinas. Las recompensas incluyen algunas que se reciben a corto plazo (por ejemplo, las varias bendiciones destacadas a lo largo del libro de Proverbios) y otras que se recibirán en el juicio final. El mensaje de hoy enfocará esta última motivación, las promesas de recompensas futuras para quienes ahora sirven a Dios fielmente. Se basará en las palabras de Jesús en Lucas 19:1127. 1. LA SITUACIÓN (19:11) 1.1.

Jesús viajaba desde Galilea en el norte de Israel hacia Jerusalén en el sur. Ya había llegado a Jericó (19:1), unos 30 kms. de Jerusalén.

1.2.

Mucha gente iba tras Jesús (19:3), porque creían que al llegar a Jerusalén él establecería el reino mesiánico. Querían estar presentes y recibir los beneficios, inclusive puestos dentro del nuevo gobierno.

1.3.

En cambio, Jesús sabía que iba a Jerusalén para morir, resucitarse y ascender a la diestra de su Padre en el cielo. Para desilusionar a la multitud y orientarles sobre el futuro, les contó una parábola.

2. LA PARTIDA DEL HOMBRE NOBLE (19:12-14) 2.1.

Explicación de 19:12-14 2.1.1. El “hombre noble” sería una persona de una familia poderosa en su país. 2.1.2. El hombre noble tuvo que ir a un país lejano para ser nombrado rey (19:12), así como Herodes el Grande y sus hijos Arquelao, Antipas, Felipe y Agripa I tuvieron que ir a Roma para ser nombrados reyes sobre el pueblo judío. 2.1.3. El hombre noble encomendó a cada siervo una mina para negociar durante su ausencia (19:13). No se trata de una mina donde se excavan minerales, sino de una cantidad de dinero equivalente a lo que un obrero ganaba en 100 días de trabajo. 2.1.4. Los conciudadanos enviaron a aquel país lejano una embajada para pedir que el hombre noble no fuera nombrado rey sobre ellos (19:14). Los judíos entendían esto perfectamente, pues en su historia reciente había pasado algo similar. Cuando Arquéalo (ver Mt. 2:22) fue a Roma en 4 a.C. para ser nombrado rey de los judíos, una embajada de 50 judíos también viajó allí, se opuso al nombramiento de Arquelao y persuadió a César Augusto darle solo la mitad del reino de su padre y el título de “etnarca” en vez de “rey”.

2.2.

Interpretación de 19:12-14 2.2.1. El hombre noble = Jesús 2.2.2. El país lejano = el cielo 2.2.3. El reino = el reino que Cristo recibiría del Padre 2.2.4. Los 10 siervos = los cristianos 2.2.5. La mina: todo lo que Dios nos ha dado. Por ejemplo, 2.2.5.1. El tiempo 2.2.5.2. Las relaciones con otras personas 2.2.5.3. La educación 2.2.5.4. El dinero 2.2.5.5. La salud 2.2.5.6. El Evangelio 2.2.5.7. La Biblia 2.2.5.8. Libertad de culto, para viajar, para evangelizar, etc. 2.2.5.9. Oportunidades de ayudar a otros 2.2.5.10. El Espíritu Santo 2.2.5.11. Dones, talentos, habilidades

3. EL REGRESO DEL HOMBRE NOBLE, AHORA COMO REY (19:15-27) 3.1.

El siervo que había ganado 10 minas, por haber sido fiel, fue llamado "buen siervo" y nombrado gobernante de 10 ciudades (19:15-17). Entre nosotros hoy puede estar el presidente de nuestro país cuando Cristo regrese para reinar durante el Milenio. No depende de nuestra capacidad, nuestro poder o nuestra posición ahora, sino de nuestra fidelidad.

3.2.

El siervo que había ganado 5 minas, por haber sido fiel, fue nombrado gobernante de 5 ciudades (19:18-19). Algunos aquí podrían ser gobernadores o alcaldes en el Milenio.

3.3.

El siervo que no había ganado nada, sino que descuidadamente había guardado la mina en un pañuelo usado para proteger la cabeza y el cuello del sol (ver Marshall), echó la culpa a su señor (19:20-21). A consecuencia fue llamado "mal siervo" y perdió aun la pequeña responsabilidad que tenía (19:22-26). ¡Ojalá que esto no pase conmigo, ni con usted cuando Cristo regrese!

3.4.

Los que se opusieron al rey fueron decapitados (lit., ejecutados) (19:27). Los que no se han sometido a Cristo el rey deben hacerlo hoy para evitar castigos peores aún.

CONCLUSIÓN: En las competencias deportivas, no ganan los más dotados. Más bien, ganan aquellos que, siendo dotados en alguna medida, trabajan duro para triunfar. Así las recompensas que recibiremos cuando Cristo regrese no dependen de cuánto Dios nos ha dado, sino de nuestro trabajo fiel usando

lo que él nos ha encomendado. ¡Ojalá que en aquel día de juicio, Cristo nos llame “buen siervo” o nos entregue grandes responsabilidades en su reino! Todo depende del servicio fiel que le rendimos ahora. Por Gary Williams Usado con permiso ObreroFiel.com – Se permite reproducir este material siempre y cuando no se venda.