La premium economy no se rinde en la lucha de clases

26 oct. 2014 - La alemana Lufthansa es la nueva aerolínea que se embarca en la tendencia de incorporar un servicio intermedio entre turista y ejecutiva, por ...
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6 | TURISMO

| Domingo 26 De octubre De 2014

“Es cierto que tardamos un poco más que otros en salir con este producto. Pero Lufthansa es una compañía que debe tener la mejor premium economy del mercado y eso requiere más tiempo. Cuando tenemos tanta competencia de aerolíneas como las de Medio oriente, apoyadas por sus gobiernos, y también de las low cost, en Europa, nuestra estrategia es no comprometer la

Hangar 7, donde el Airbus 380 se va a dormir

Asientos más amplios y cómodos con más espacio libre entre las hileras

Fotos gentileza luFthansa

La premium economy no se rinde en la lucha de clases a bordo. La alemana Lufthansa es la nueva aerolínea que se embarca en la tendencia de incorporar un servicio intermedio entre turista y ejecutiva, por una buena tarifa

Daniel Flores La NaCioN

La encargada de controlar los pasajes antes de las máquinas de rayos para el equipaje de mano, en la terminal 1 del aeropuerto de Fráncfort, miraba confundida. “¿Categoría G? ¿Qué es eso? Nunca lo vi.” Es que no, nunca lo había visto porque era el primer día, el gran debut para las tarjetas de embarque de Lufthansa con uno de los códigos que identifican la nueva clase premium economy. Ni turista, ni ejecutiva, ni primera, los tres clásicos estratos socioeconómicos del transporte aéreo internacional. Premium economy sería la cuarta categoría, en este caso

ubicada en el avión entre turista y ejecutiva. Durante la última década, más y más grandes jugadores, como British airways, airFrance, air Canada, KLM, alitalia y un buen número de compañías norteamericanas, incorporaron esta opción que intenta seducir tanto a viajeros de negocios en plan de ajuste como a turistas dispuestos a pagar un poco más por mayor comodidad. ahora es el turno de la alemana Lufthansa, que estrenó los 32 asientos de premium economy días atrás en un Boeing 747-8, volando Fráncfort-Washington DC, con ejecutivos de la casa, prensa e invitados especiales. En la puerta Z52, el equipo de la compañía encargado de preparar

el producto despidió al vuelo LH418 entre aplausos y luciendo remeras con la leyenda amo la premium economy. ¿El equilibrio justo? Concebido como un justo medio entre las prestaciones de las tradicionales turista y business, el flamante servicio ofrece al pasajero un asiento más cómodo y con mayor espacio libre entre hileras, en nuevas butacas con pantallas individuales más grandes; derecho a despachar dos valijas de 23 kilos (una más que en turista); menú especial, kit con amenidades, trago de bienvenida y botella de agua. También, acceso a los salones de Lufthansa por un cargo extra de 25 euros.

Lufthansa cuenta en su flota con nada menos que once Airbus 380, el avión más grande en la actualidad, y espera otros tres para el año próximo. En el hub de la compañía en Fráncfort, el gigantesco e impecable Hangar 7 es donde estas colosales naves descansan y se ponen a punto regularmente. “A bordo del A380, el pasajero con experiencia en vuelo tiene la sensación de mayor estabilidad”, asegura Ulrich Fuchs, ex piloto de la línea alemana, jubilado a los 60 años y actualmente a cargo de guiar las visitas a las instalaciones de este moderno aeropuerto y del centro de entrenamiento de tripulantes, con sus simuladores de última generación.

excelencia del servicio por el que somos una aerolínea cinco estrellas”, definió Jens Bischof, miembro del directorio del grupo Lufthansa, en charla semiinformal, parado en un espacio libre junto a los baños del 747-8, durante el inaugural cruce de ocho horas sobre el atlántico, de alemania a Estados Unidos. La premium economy estará disponible en todos los 747-8 de la firma

Fuchs es un hombre alto y canoso, de trato amable, hasta simpático, pero también protocolar. Cualquiera diría que es un típico alemán, así que sorprende bastante cuando de pronto exclama ante los invitados al tour: “¿Ustedes son de Argentina? ¡Yo soy boliviano!” En perfecto castellano, el ex piloto cuenta que nació en La Paz, donde su padre germano tenía un negocio de importación de maquinaria para minería. A los 17 años se radicó definitivamente en Alemania. “Hice la carrera de piloto y siempre esperaba que me tocaran rutas a América latina”, admitió, visiblemente feliz con la oportunidad de volver a hablar en su otro idioma. Junto al aeropuerto de Fráncfort, Lufthansa cuenta con uno de los centros de entrenamiento más importantes de Europa, tanto para pilotos como para el resto de la tripulación. Por allí pasan alumnos de otras veinte aerolíneas de distintas banderas.ß

a partir del 1° de diciembre. al mismo tiempo, la empresa se encuentra en pleno proceso de renovación de sus asientos de primera y business, dentro de lo que anuncia como “la más importante mejora de todas las clases en nuestra historia”. algunas especificaciones del asiento premium economy: tiene un seat pitch (la distancia de un punto del asiento al mismo punto del asiento siguiente) de 97 centímetros; y es unos 3 centímetros más ancho que los de económica; se reclina también un poco más, el apoyacabeza es adaptable a la posición deseada y cuenta con apoyapiés. Tiene pantalla táctil de entre 11 y 12 pulgadas, además de puerto USB y enchufe eléctrico. Para entender la relación entre tarifas, digamos que un pasaje de ida Buenos aires-Fráncfort en premium economy, para diciembre, cuesta unos 11.000 pesos. El mismo tramo costaría en económica 7300 pesos y en ejecutiva, 20.000. Es decir que la nueva intermedia está más cerca de economy que de business. La misma proporción se repite casi con exactitud, por ejemplo, en los vuelos de airFrance entre Buenos aires y París. Hacía 35 años que Lufthansa no presentaba una nueva clase a bordo. Los cambios en esta industria no son rápidos, implican largos procesos, incluso de varios años. Como en este caso, que comenzó con tests de consumidores y continuó en estudios de diseño; involucró proveedores de materiales y fabricantes, y terminó con el plan de reconfiguración total de los aviones. “La primera etapa, con la pantalla en blanco, es la más divertida. Pero luego sigue un trabajo muy duro, de hasta cinco años. Y cuando terminás de implementar los cambios, probablemente ya tenés que comenzar con el próximo proyecto”, explicó Dorothea von Boxberg, directora de Passenger Experience Design Business & Premium, de Lufthansa. Los pasajeros invitados pudieron compartir los detalles del vuelo LH418 desde el aire, por correo electrónico o redes sociales. Desde 2010, Lufthansa provee a bordo el servicio de internet FlyNet, actualmente disponible en casi toda su flota de largo alcance. La tarifa por una hora de conexión es de 9 euros. Por 24 horas, 17 euros. ideal... para quienes necesitan trabajar también en el avión, uno de los últimos refugios que prevalecían ante la hiperconectividad reinante.ß