La paternidad de River en todo su esplendor fue

go Rodríguez que mirar fijo la pe- lota. Pero algo pasó que ... Teo Gutiérrez eludió a Rodríguez en el tercero. River se ... 8. Teófilo Gutiérrez. 7. Diego Rodríguez.
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el torneo de primera división

| Lunes 22 de septiembre de 2014

La paternidad de River en todo su esplendor fue mucho para los Rojos El líder se floreó ante el equipo de Avellaneda, que de principio a fin sufrió los embates de su rival ● Pisculichi, Rojas, Teo Gutiérrez y Mora, los goles ● Lleva 13 éxitos seguidos en el Monumental ● Descontó Mancuello Andrés Vázquez PARA LA NACIoN

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os 19 partidos invictos. Los 13 éxitos en cadena en el Monumental. La contundencia frente al arco, que lo posiciona como el equipo más goleador de certamen con 19 tantos. La paternidad sobre Independiente, que de los últimos 21 en Núñez sólo ganó dos... Todas estas cuestiones le tiró River con su renovada camiseta al conjunto de Avellaneda. Se trepó una vez más a la ilusión del campeonato. Supera fechas y acumula alegrías. Está en el mejor de los cielos en la tabla y, hoy, en este momento arrollador del equipo de Marcelo Gallardo, no hay quién le pueda astillar la esperanza. Muchos menos los vaivenes de Independiente. Y desde el comienzo le resultó redondo el encuentro. A los tres minutos, cuando Leonardo Pisculichi tiró su tiro libre al corazón del área y todos se chocaban, no había demasiada complicación para Diego Rodríguez que mirar fijo la pelota. Pero algo pasó que confundió al arquero, el balón picó y le pasó por encima del cuerpo. La pujanza local destrozó en un rato cualquier intención de los Rojos. River tocaba y le ponía intensidad a su juego colectivo. Avanzaba con acompañamiento de los volantes y, para colmo, los defensores de Independiente –al principio fueron cinco– no cerraban bien ante cualquier atisbo de desnivel local. Las expectativas que habían despertado uno y otro en los primeros minutos eran por demás dispares. La actualidad de River era apabullante y contundente. Perforaba a un rival que se entregó al desconcierto rápido. Con una evidente diferencia de jerarquía entre ambos conjuntos, el foco del partido se mantuvo en todo aquello que pudiera realizar River. Los Pisculichi, los Sánchez, los Rojas, los Mora y los Teo Gutiérresz se filtraban por cualquier resquicio defensivo de los Rojos y con los minutos que pasaban se sumaba un crecimiento colectivo impresionante. El plus lo marcaban los de arriba, pero ya era otra cosa desde la salida misma del fondo. Golazo de Rojas En esa tónica se dio el primer tiempo hasta que, a los 44 minutos, Ariel Rojas fue el hacedor de uno de sus mejores goles desde que está en River. Cristian Tula quiso despejar largo, pero su intento imperfecto se desvió ha-

cia el centro. Rojas esperó el balón, se acomodó e hizo que derivara hacia el ángulo del vencido Rodríguez. En Independiente fallaban los de arriba y los volantes subían, pero apenas si penetraban en el área. Los remates desde afuera fueron una constante, pero encima Barovero tenía estiradas certeras ante los remates de Mancuello y de Montenegro, o ante algún cabezazo aislado de Riaño. En el arranque del segundo tiempo, River no era el torbellino inicial y el conjunto de Avellaneda le ponía una pizca de coraje. Y así llegó el descuento de Mancuello. Pero Tula volvió a equivocarse y dejó servido el gol a su rival. Tras una mano no vista de Maidana y que terminó en un pase profundo, Teo Gutiérrez eludió a Rodríguez en el tercero. River se mostraba claramente superior. Incluso, la tranquilidad por la actuación -y por el resultado también, obvio- le permitía florearse con un punzante y dinámico Mora. Algún número ensayado en la semana le salió en el césped con ese tiro por elevación por encima del arquero. Un toque por el aire para proponer un “ole” que encendió a la tribuna. Independiente volvió a sentir el rigor de una realidad donde la felicidad le da la espalda. El verdugo fue el de siempre: River, que lo superó inobjetablemente. La contundencia millonaria fue demasiado para los insuficientes intentos y la capacidad de reacción de los Rojos.ß

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river independiente Marcelo Barovero C Gabriel Mercado Jonathan Maidana Ramiro Funes Mori Leonel Vangioni A Carlos Sánchez A Matías Kranevitter A Ariel Rojas Leonardo Pisculichi Rodrigo Mora Teófilo Gutiérrez DT: Marcelo Gallardo

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Cambios: PT: 25m, Leonardo Ponzio (7) por Kranevitter. ST: 14m, Tomás Martínez (6) por Pisculichi, y 40m, Lucas Boyé por Mora. Suplentes: Julio Chiarini, Germán Pezzella, Eder Alvarez Balanta, Augusto Solari.

Diego Rodríguez 5 Néstor Breitenbruch 4 Sergio Ojeda 4 Cristian Tula C 3 Víctor Cuesta A 4 Lucas Villalba 4 Franco Bellocq A 4 Federico Mancuello 6 Daniel Montenegro 5 Matías Pisano 5 Claudio Riaño 5 DT: Jorge Almirón Cambios: ST: al inicio, Francisco Pizzini (5) por Ojeda; 12m, Jesús Méndez A (5) por Montenegro, y 24m, Alexis Zárate por Breitenbruch. Suplentes: Germán Montoya, Federico Insúa, Sebastián Penco, Juan Martín Lucero.

GOLES: PT: 3m, Pisculichi (R), y 37m, Rojas (R). ST: 12m, Mancuello (I); 20m, Gutiérrez (R), y 32m, Mora (R). CANCHA: River ÁRBITRO: Pablo Lunati (bien, 6)

Mora remata por encima de Rodríguez

1 paternidad millonaria De los últimos 21 partidos en Núñez, Independiente apenas ganó dos: Clausura 1996 (4-1) y Apertura 2009 (3-1). El resto, tres empates y 16 victorias de los millonarios.

2 Festejo de tiro libre

Hacía dos años que River no marcaba un gol de tiro libre: desde aquel tanto de Leo Ponzio contra Boca, el 28 de octubre de 2012.

3 Casaca de estreno

La camiseta, que fue presentada el martes pasado, en el Museo, debutó con los Rojos y lo hizo con el mejor suceso. Las tres tiras rojas en las mangas, una reminiscencias de aquel modelo que utilizó el último equipo tricampeón, entre 1996 y 1997.

mauro alfieri

Sin nombres propios: hablan del mérito colectivo Los goleadores de River se ilusionaron con el triunfo; cruce entre Teo Gutiérrez y Montenegro Aunque agitadas, al borde del campo de juego, fueron palabras de genuina satisfacción. River ganó con tanta claridad que hasta se tomó con calma el momento de las declaraciones, pese a que las pulsaciones aún seguían bastante altas. Allí estuvieron los goleadores. Uno tras otro. Todo estuvo en orden, salvo por algún entredicho entre Teófilo Gutiérrez y Daniel Montenegro, de Independiente, ya en los vestuarios, por los dichos días atrás de Rolfi, que dijo verle defectos a los millonarios. “Estamos muy contentos con el

trabajo del equipo. En el segundo tiempo estuvimos un poco más imprecisos, pero a partir del tercer gol manejamos el desarrollo sin inconvenientes. Lo que nos está pasando es algo muy lindo. En cada partido mantenemos la concentración al máximo”, dijo el uruguayo Rodrigo Mora, que recuperó la confianza a partir de la llegada de Marcelo Gallardo, ya que no había sido tenido en cuenta por Ramón Díaz. Ariel Rojas aseguró: “Logramos una importante victoria con un rival que venía muy bien como Independiente. Ahora vienen otros partidos muy lindos”. “Hicimos un gran esfuerzo. Los goles se dan por el sacrificio de mis compañeros. Yo estoy donde tengo que estar: atento para que no se me escape la presa”, comentó Teo Gutiérrez.ß