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OPINION

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Miércoles 17 de febrero de 2010

Cartas Buenos Aires, miércoles 17 de febrero de 2010

“LA NACION será una tribuna de doctrina” (Núm. 1, Año 1)

Fundado por Bartolomé Mitre el 4 de enero de 1870 Director: BARTOLOMÉ MITRE

Santa Cruz, un feudo anárquico Es de esperar que la Corte haga valer su autoridad para que el gobernador Peralta reponga en su cargo al ex fiscal Sosa

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A injustificada demora del gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, en cumplir la sentencia de la Corte Suprema nacional, que, en noviembre último, le ordenó reponer en su cargo al ex fiscal general provincial Eduardo Sosa, constituye otra gravísima afrenta a la supremacía del Poder Judicial federal y a la unidad de la República, que merece una severa respuesta por parte del máximo tribunal del país. En 1994, Sosa, que era cuestionado por su independencia por el entonces gobernador Néstor Kirchner, fue arbitrariamente privado de su cargo cuando una ley suprimió la función de fiscal general provincial. Ese hecho dio lugar a un dilatadísimo pleito al que la Corte, quince años después, le puso fin cuando ordenó a Peralta que reponga a Sosa en sus funciones. Ese fallo del máximo tribunal no fue el primero, sino el sexto, pero esta vez incluía un plazo perentorio de 30 días para que Peralta cumpliera el mandato judicial y, además, un apercibimiento de denunciarlo ante la justicia penal. Por si hubiera alguna duda, frente a un pedido de aclaratoria presentado por Peralta, la Corte rechazó el planteo y ratificó esa misma orden, con todos sus alcances. Sin embargo, transcurrido el plazo otorgado, que venció el 29 de diciembre último, Peralta desobedeció la expresa decisión que le impusiera la Corte mediante el sencillo trámite de hacer una cosa diferente de lo específicamente ordenado: pretende designar a Sosa en un cargo nuevo, que tendrá funciones notoriamente más acotadas y que el gobernador propone crear con tal fin. En esta ocasión, Peralta invoca la excusa de que debe asegurar los derechos del fiscal Claudio Espinosa, quien actualmente desempeña el cargo que reemplazó al que desempeñaba Sosa y al que accedió luego de la irregular remoción de este último. No obstante, hay que puntualizar que la Corte

Suprema, previendo este posible argumento, expresamente estableció que para resolver la situación de Sosa no puede oponerse la estabilidad o inamovilidad de Espinosa en el ejercicio de sus incumbencias. Es decir, Peralta, con el único propósito de obstruir el cumplimiento de la sentencia firme de la Corte, pretende tener ante sí un problema que el máximo tribunal ya resolvió de antemano. El proceder asumido por el gobernador es de una gravedad inusitada porque implica la reiterada sublevación de un gobierno local frente a las decisiones supremas del gobierno federal. En efecto, la Argentina no es una organización de Estados confederados, sino un país federal cuyas partes integrantes, las provincias, no tienen atribuciones para ejercer el derecho de secesión (separación) ni el derecho de declarar la nulidad de las decisiones de los poderes centrales, prerrogativa esta última que implícitamente Peralta pretende ejercer en contra del sistema constitucional nacional. Ambas potestades han desaparecido con el federalismo, en tanto y cuanto el asiento de la soberanía reside únicamente en cabeza de la Nación o Estado nacional. Como bien lo subraya la sentencia de la Corte y tomando el texto constitucional, los mandatarios provinciales “son agentes naturales del gobierno federal para hacer cumplir la Constitución y las leyes de la Nación”. Tanto es así que el tribunal, con buen criterio, le encomienda al gobernador de Santa Cruz –bajo el apercibimiento de incurrir en la comisión de un delito de desobediencia si incumpliese su manda– el compromiso de asegurar la aplicación de lo que ella ha decidido, para así restablecer el orden federal alterado desde hace cerca de quince años. Es de esperar que la Corte Suprema de Justicia de la Nación haga valer su jurisdicción y autoridad en este caso de gravedad institucional, utilizando las herramientas a su alcance, y que incluso denuncie penalmente a Peralta, como lo anticipó en su fallo, a los fines de no convalidar actitudes anarquizantes e incompatibles con la plena vigencia de un Estado de Derecho.

Daño a la imagen del Argerich No se puede admitir el juicio negativo de un ex ministro de Salud porteño para con el hospital y sus equipos médicos y auxiliares

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A reciente operación a la que fue sometido el ex presidente Néstor Kirchner puso de manifiesto dos situaciones. La primera, de índole estrictamente personal y que desnuda la falta de diálogo democrático, fue la ausencia absoluta de políticos opositores que se acercaran al Sanatorio de los Arcos para tomar conocimiento en forma personal del estado de salud del ex mandatario. La segunda, la absoluta ligereza con que los funcionarios kirchneristas hacen política de barricada manoseando instituciones, en este caso nada menos que de la salud pública de la ciudad de Buenos Aires. En octubre de 1993, mientras ejercía su primer mandato, Carlos Menem se sometió a una intervención quirúrgica al presentar una obstrucción en la arteria carótida. Raúl Alfonsín, líder del partido de oposición, se hizo presente para expresar su deseo de pronta recuperación. Años más tarde ese gesto de convivencia republicana fue retribuido por el primero cuando Alfonsín sufrió un grave accidente automovilístico en la provincia de Río Negro. La situación se repitió en junio de 2001 con motivo de la operación practicada al presidente Fernando de la Rúa. Estos episodios no son menores, sino indicadores de madurez política, que a la luz de la historia importan avances significativos de convivencia cívica, que contrastan positivamente con el recuerdo que historiadores y memoriosos tienen de la profundidad del desencuentro nacional, expresado en la crueldad con que muchos celebraban el cáncer que padecía Eva Perón. En ocasión de la operación de Kirchner, los políticos opositores sólo pudieron dar su opinión cada vez que les era requerida por el periodismo. En igual sentido llama la atención la ausencia de gobernadores, intendentes y figuras destacadas del justicialismo, dado que se trata de un ex presidente, el jefe del partido de gobierno y un diputado de la Nación. Desde estas columnas ya nos hemos referido a la destemplada respuesta

a la gentileza del arzobispado porteño de enviar al capellán, como en las ocasiones reseñadas. Sin embargo, una actitud inadmisible y vergonzosa fue la adoptada por el gerente de prestaciones especiales de la Anses, el doctor Donato Spaccavento, quien no dudó en declarar con énfasis ante los micrófonos que su consejo al enfermo había sido que no se dejara atender en el hospital Cosme Argerich, tal como Kirchner había dispuesto cuando ocupó la jefatura del Estado. En la opinión de Spaccavento, bajo la gestión de Mauricio Macri el nosocomio no garantiza la atención que exige un paciente con esa patología. Es probable que Spaccavento, ex responsable del área del Salud durante la opaca gestión de Aníbal Ibarra y hombre de confianza del matrimonio presidencial, esté influido por un sentimiento de rencor contra el gobierno porteño por haberlo separado de la dirección de la institución. En cualquier caso resulta inaceptable que no se percatara de la gravedad de sus dichos y de su deslealtad para con la salud pública y el equipo médico y auxiliar del hospital en su conjunto, que aun con restricciones presupuestarias y dificultades trabajan con ahínco para atender satisfactoriamente a gran parte de los porteños, y muchos provincianos y extranjeros imposibilitados de acceder a la medicina prepaga y para quienes el hospital público es la única alternativa. Una opción que en materia de calidad profesional se compara con éxito con la mejor medicina privada y ha resistido todos los ensayos en estilos de gestión, los intentos de abandono malintencionado practicados con intención de vaciamiento, a los que ha sido sometida la medicina pública de modo sistemático desde algún sector de la política asociado con el corporativismo sindical. Es tiempo de que los que se autodefinen como defensores de la salud pública recuperen el valor de la palabra, distingan entre los temas que pueden ser materia de disputa política partidaria y aquellos que deben ser reservados a la discusión responsable para tranquilidad de los ciudadanos. La sociedad en su conjunto espera que las declaraciones de Spaccavento sean inmediatamente rectificadas.

de lectores

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Pepe Mujica Señor Director: “Quisiera manifestar mi admiración por las palabras que el presidente electo del Uruguay, José Mujica, dijo ante diferentes empresarios durante una cena llevada a cabo recientemente en Punta del Este. “Este verdadero ex tupamaro, que no necesita riqueza, ni lujos, ni ropa de marca para ser exitoso y sigue utilizando su lenguaje de hombre simple en sus discursos, es la muestra manifiesta y fehaciente de la nueva dirigencia latinoamericana. “Sólo le pido al lector que compare a este hombre con otros presidentes americanos y saque sus conclusiones, y, además, grabe en su mente una de las frases que don Pepe manifestó en su alocución: «Necesitamos empresas que prosperen, que puedan pagar impuestos y generar riqueza. Si no, nos quedamos sólo con los sueños y la utopía».”

Víctor J. Cordovero DNI 4.407.258

Gracias por el aumento Señor Director: “Tenemos que reconocer que nos equivocamos cuando pensamos que el aumento que iba a dar esta ley de inmovilidad sería de 17,5 por ciento. Con esta grata sorpresa nos quedamos más tranquilos, atrás quedaron nuestras penurias para poder comprar la comida diaria, nuestros remedios y hasta nuestro esparcimiento. Le juro que no sabemos qué hacer con los 2,21 pesos por día que vamos a recibir como premio al esfuerzo que hicimos para sobrevivir los últimos 6 meses. Gracias, señora. “Presidenta, siga administrando así nuestro dinero que vamos por el buen camino.”

urbana, tanta falta de eficiencia para asegurar prestaciones básicas como salud, justicia, educación o seguridad, de no tener gas en invierno, de que no haya luz en verano y de que jamás tengan vergüenza o un poco de decoro al menos. “Obviamente, en un gobierno que más que funcionarios tiene obsecuentes del Estado populista, es poco probable que, como a Catilina en el Senado romano, alguno le diga claramente a la Presidenta, sin temor a represalias, que la paciencia de los pueblos tiene un límite; por eso desde aquí hoy se lo digo, como simple ciudadano y con el mayor de los respetos por su investidura. “¿Hasta cuándo, doña, abusarán ustedes de nuestra paciencia?”

Andrés A. Solanot Sifuentes Doctor en medicina Avda. H. Yrigoyen 5385 Remedios de Escalada (Bs. As.)

Amenazas piqueteras Señor Director: “El matrimonio presidencial y su séquito están comenzando a tomar de su propia medicina. Las distintas facciones piqueteras se les van dando vuelta. No hay que analizar demasiado a fondo la situación que estamos transitando para darnos cuenta de que la chance de volver a sufrir una suerte de guerra interna está cada vez más cerca. ¿O acaso las cientos de miles de personas que por una u otra razón se quedan sin la dádiva compravoluntades del Gobierno no van a salir a reclamarla por las malas? “Lamentablemente, somos todos los argentinos, y no sólo los actuales

Vacas escondidas

gobernantes, quienes pagaremos las consecuencias de que estos últimos, a lo largo de siete años, hayan echado a millones de personas del sistema en nombre de las libertades individuales, la equidad social, los derechos humanos y todas aquellas expresiones que se cuidan muy bien de no incluir las obligaciones de cada uno ni de colocar el trabajo en sí mismo como la única forma de progresar particular y colectivamente.”

Mariano Guaia DNI 20.205.908 [email protected]

Marcela Zurbriggen DNI 17.114.135

Inflación Señor Director: “En uno de sus habituales discursos la señora Presidenta sostuvo que «la inflación no es producto de la expansión monetaria». “Ahora bien, sin perjuicio de la validez técnica o no de tal afirmación, es importante que finalmente la máxima autoridad del país reconozca la existencia de la inflación que diariamente carcome los bolsillos de los argentinos, especialmente de los más pobres. “Sería bueno que a partir del reconocimiento de esta realidad la señora Presidenta dispusiera el sinceramiento de las estadísticas del Indec e iniciara una política económica seria basada en extremos fácticos y no en las elucubraciones del señor secretario de Comercio de la Nación.”

Dra. Patricia Arsen DNI 22.818.064

“¿Hasta cuándo?” Señor Director: “Si yo le dijera aquí francamente lo que pienso de quienes gobiernan la Argentina, probablemente por una cuestión de educación usted podría llegar a no publicar estas líneas, así que me remitiré a comentarle que debido a los cortes de electricidad que me ha tocado padecer en estos últimos días de calores agobiantes estoy enojado, malhumorado, mal dormido, cansado y aburrido de que me quieran explicar lo inexplicable. “Me cansé de que la Presidenta aparezca en la tele hablando del cerdo y el Viagra; ya me cansé de soportar tanta delincuencia, tanta violencia

Nieves Zuberbühler DNI 33.220.960 [email protected]

Pase a retiro Señor Director: “Me he enterado de que la ministra de defensa resolvió pasar a retiro al general Hernán Prieto Alemandi por haberse reunido con el vicepresidente, según una versión, o con militares retirados, según otra. “Esto muestra a las claras el espionaje interno que se realiza, a pesar de la ley que lo prohíbe, y la arbitrariedad con que se sigue manejando este desgobierno. Asimismo pone en evidencia una vez más el triste papel que hace la cúpula del Ejército ante la sociedad y ante sus subalternos al permanecer en sus cargos «sin chistar», manteniendo una actitud sumisa y obsecuente, a la espera de ser premiados con alguna embajada. “Ya que las virtudes sanmartinianas las han dejado de lado hace tiempo, sería bueno que se inspiraran en sus camaradas brasileños y chilenos para ejercer dignamente sus funciones cuando el poder político intenta extralimitarse.”

Lucio Strazza [email protected]

Tomás Eloy Martínez Señor Director: “En las numerosas y merecidas notas dedicadas a la partida de Tomás Eloy Martínez no figura su paso por la entonces Escuela de Cinematografía (hoy Facultad) de la Universidad Nacional de La Plata. Quizás el propio Tomás no le daba importancia, pero sus alumnos lo recordamos con amor y respeto, como ocurre con todos los profesores que nos formaron en la década del 60. “Asistíamos fervorosamente a todas sus clases y leíamos sus críticas de cine, firmadas con sus siglas, con el mismo entusiasmo. ¡Chau, TEM, y muchas gracias!”

Hugo de la Sota Presidente Asociación Mayores Olvidados [email protected]

Señor Director: “Sugiero que a algún ministro, secretario, asesor o técnico entendido en ganadería se le ocurra utilizar la parafernalia tecnológica con que cuenta la AFIP para escrutar las existencias agropecuarias (según esa misma repartición indica en sus amables cartitas) a fin de hacer saber con certeza a la señora Presidenta que la hacienda vacuna que hoy desapareció y origina el alza consabida de precios no se encuentra escondida en roperos pecuarios y corrales subterráneos, sino que no existe más, tal como predijimos (sin necesidad de bola de cristal alguna, sólo teniendo en cuenta las pésimas políticas pecuarias gubernamentales) desde hace más de dos años.”

Otros, para infortunio de los pueblos, avivan el rencor como estrategia de poder y de gobierno, estancándose en las desdichas del pasado a costa de un futuro aciago, sin perdón y sin amor. “A estos últimos recomiendo la película.”

Abuelitos Señor Director: “Mientras el «abuelito» Kirchner se dedicaba a la usura (D’Elía dixit) y a mejorar su economía personal, el «abuelito» Patricio Peralta Ramos fundaba (el 10 de febrero de 1974) la ciudad de Mar del Plata y modificaba para bien y para siempre el futuro de los millones de agradecidos argentinos y argentinas que aquí viven y veranean.”

Fernando Rivera [email protected]

Invictus Señor Director: “El fin de semana fui al cine a ver Invictus, película que narra la historia de Nelson Mandela tras la caída del apartheid. Su primer tiempo de gobierno coincidió con la Copa Mundial de Rugby y, a pesar de que la selección sudafricana era un símbolo de la segregación, él se valió de ese deporte para ayudarlo a unir un país fragmentado. “Mandela es un ejemplo; estuvo 27 años preso en una diminuta celda y salió de ella decidido a perdonar a quienes lo habían encerrado; gobernó sembrando amor e igualdad en un país herido por el racismo. “Cuando en una sociedad están arraigados el odio y el resentimiento, es un arduo trabajo eliminarlos: los gobiernos cambian, pero esos sentimientos suelen persistir. “Sin embargo, algunos gobernantes luchan para vencerlos, sembrando hermandad, dando vuelta oscuras páginas del pasado y proyectando hacia el futuro, para que toda la población conquiste el progreso.

Atención al lector 5199-4777 Impresión y distribución: Zepita 3251, Capital Federal U Las ventas de LA NACION son auditadas por el IVC. U © Año 2009, S.A. LA NACION, Dirección Nacional del Derecho de Autor, expediente renovación Nº 727.768. Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido del presente diario.

Clara Zappettini [email protected]

Respuesta Señor Director: “Escribo en repuesta a una carta de lectores enviada por el señor Bernardo Shaw de Estrada, en la cual el lector, tal vez ayudado por algunos amigos, se pone insólitamente en juez de mi conducta con relación a mi familia. Al respecto hago algunas observaciones: “a) Tengo varios años de militancia política como peronista y jamás renegué de mi origen familiar, cultural y nacional. “b) Mis compañeros de militancia peronista jamás objetaron ni pusieron en tela de juicio mi forma de actuar por el hecho de llevar un apellido (que llevo con orgullo) de historia francamente no peronista. “c) Agradezco profundamente la formación que en mi hogar me brindaron, porque siempre me inculcaron el valor de actuar conforme a la libertad de pensamiento y al criterio propio. “d) Solamente cierta decadencia seudoaristocrática, sin otro compromiso que con el club social, puede no entender eso. “Por último, le recomiendo al lector Shaw de Estrada que si lo que quiere es disfrutar viendo su apellido en letra de molde, se abstenga de hacerlo juzgando mi conducta familiar, ya que no le reconozco autoridad para hacerlo.”

Mariano Pinedo DNI 21.072.492

Agradecimiento Señor Director: “Quiero expresar mi agradecimiento a las doctoras Donofrio y Micheletti, pertenecientes a la sección Area Programática del Hospital Interregional de Mar del Plata, por la eficiencia, la dedicación y el profesionalismo ofrecidos ante el accidente que sufrió mi hijo Gabriel. “Sin duda, profesionales de esta calidad enaltecen la salud pública.”

Dr. Carlos Hanessian CI 6.485.802 [email protected]

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