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29 may. 2013 - nes los habitantes de Belgrano. Co- mo cada vez que llueve, el cruce ... mismo, por prevención, los ramales. Mitre y Suárez del ferrocarril Mitre.
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BUENOS AIRES

fue Breve, perO trAstOrnó A lA ciudAd

| Miércoles 29 de Mayo de 2013

ZONAS AFECTADAS EN EL CONURBANO

EN CAPITAL FEDERAL Estaciones que registraron más lluvia en capital (mm)

Granizo

Lluvia hasta las 14 hs (mm)

SERVICIOS AFECTADOS

dad d Uni Universi Ciudad Universitaria 55

80 Garín

Líneas de subte A, B, C, D, H

Palermo

(entre las 11.30 y las 13)

Chacarita Villa Urquiza

53 Martínez

La inusual cantidad de agua caída ayer, sumada al granizo, golpeó fuerte en la Ciudad y el conurbano e interrumpió los servicios de transporte

úzar 51 úzar 51 Villa Ortúzar

32 Castelar

Trenes sin funcionar

Balvanera 43 Reserva ecológica

Pque. Chacabuco Boedo 46 44

Capital

5km

51 Recoleta

Villa Devoto

40 Olivos 40 Villa Ballester 41 Villa Martelli

San Nicolás

56 Colegiales

Pque. que. e. A Avella Avellaneda lane ane ned 57 57

Monserrat Caballito

Semáforos 68 cruces quedaron sin funcionamiento por falta de tensión

1 km

N

Mitre, ramales Tigre y Suárez

buenos aires Edición de hoy a cargo de Luis Moreiro | www.lanacion.com/ciudad

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emergencia climática | se hizo de noche en pleno día

Otro temporal con anegamientos, granizo y cortes de luz en Buenos Aires En algunos barrios porteños cayeron más de 50 milímetros en pocas horas; hubo calles inundadas en Saavedra, Belgrano, Palermo y Recoleta; se interrumpió el servicio de subtes y faltó luz; la tormenta afectó al conurbano norte y a La Plata No se salvó ni la Casa Rosada. La vista del Salón de los Patriotas, en la planta baja de la sede del gobierno nacional, inundado, fue apenas una postal de los trastornos provocados por una nueva tormenta que descargó toda su fuerza sobre la ciudad. Calles anegadas en Saavedra, Belgrano, Palermo, Recoleta y el centro, granizo en una decena de barrios porteños, interrupción de casi toda la red de subtes y de algunos ramales ferroviarios, 68 semáforos fuera de servicio y cortes de luz fueron las principales consecuencias del temporal. La lluvia comenzó a caer con violencia a partir de las 11.30, poco después de que el cielo se cubriera de nubes de un gris intenso que transformó el día en noche en apenas 45 segundos. Según información brindada por la Subsecretaría de Emergencias porteña, hasta las 14 habían caído 57 milímetros en Parque Avellaneda; 56, en Colegiales; 55, en la costanera norte; 51, en Villa Ortúzar y en Recoleta; 46, en Boedo; 44, en Parque Chacabuco; 43, en la costanera sur; 26, en Mataderos; 23, en Villa Lugano, y 21, en Villa Real. La capacidad de escurrimiento promedio de la red pluvial porteña es de 25 milímetros por hora; en la zona del arroyo Maldonado, debido a la obra de los aliviadores, aumentó a 40 mm/h. Caudales mayores provocan inundaciones. En tanto, en el Gran Buenos Aires, la zona norte registró los valores de precipitaciones más altos. En Garín, partido de Escobar, se acumularon 80 milímetros; en Martínez (San Isidro), 53; en Villa Martelli y Olivos (Vicente López), 41 y 40, respectivamente. Los anegamientos afectaron distintos puntos críticos de la ciudad. En la cuenca del arroyo Medrano, el barrio más afectado fue Saavedra, más precisamente, el entorno de la zona de Ruiz Huidobro y Balbín, así como el Barrio Mitre. En este último, que fue severamente damnificado por la tormenta del 2 de abril, ayer hubo 40 cm de agua en las calles, pero no ingresó en las viviendas, según confirmaron vecinos a la nacion. Sobre la cuenca del arroyo Vega, volvieron a padecer las inundaciones los habitantes de Belgrano. Como cada vez que llueve, el cruce de Blanco Encalada y Cabildo se convirtió en un río, para perjuicio de los comerciantes que sufren periódicamente el ingreso de agua y la pérdida de mercadería (ver aparte). Tanto en la cuenca del Medrano como en la cuenca del Vega están pendientes de realización obras hidráulicas que permitirán que el agua fluya con mayor rapidez. Palermo y Recoleta también sufrieron anegamientos. El subsecretario de Emergencias porteño, Néstor Nicolás, confirmó que hubo problemas con los drenajes en Tagle y Libertador, en los alrededores de la sede del Automóvil Club Argentino (ACA). Como se dijo, la Casa Rosada sufrió el ingreso de las lluvias desde la calle Balcarce. En el Congreso de la Nación, filtró agua por el techo del recinto de la Cámara baja y también entró al Salón de los Pasos Perdidos. Entre las 11.40 y las 12, salieron de servicio las líneas A, B, C, D y H de subtes, así como el Premetro, porque el agua invadió las vías. A las

En Blanco Encalada y Amenábar, un padre junto a su hijo son trasladados en un gomón de la Policía Federal 12.50, según Metrovías, la red volvió a operar con normalidad. Asimismo, por prevención, los ramales Mitre y Suárez del ferrocarril Mitre fueron interrumpidos entre las 12.15 y las 13. Según la Subsecretaría de Transporte porteña, 68 cruces semafóricos dejaron de funcionar por falta de tensión en Palermo, Recoleta, Núñez, Almagro, Caballito, Villa Crespo, Balvanera, Monserrat, Belgrano, Retiro, San Nicolás y Puerto Madero. Efectivamente, hubo cortes de luz en el microcentro, Recoleta, Palermo y Belgrano. En la zona norte, la tormenta no dejó evacuados, pero las lluvias fueron copiosas. En San Isidro, se anegaron algunas calles principales como la avenida Rolón y Vélez Sarsfield. En San Fernando, el intendente Luis Andreotti denunció la explosión de una cámara de desagüe en el límite entre San Fernando y San Isidro, y acusó al gobierno de Daniel Scioli por la falta de obras de desagüe en el arroyo Pavón. “El responsable de las obras hidráulicas, que es la Provincia, actúa muy poco”, sostuvo. Las lluvias llegaron hasta La Plata. Como el 2 de abril, el barrio La Loma fue el más damnificado. En algunos puntos fue tal la acumulación de agua en la vereda que los habitantes improvisaron piquetes para evitar que los automovilistas transitaran por allí y provocaran olas que favorecieran el desplazamiento del líquido hacia las casas.ß

del editor: cómo sigue. Otra vez el agua, como enemigo de los porteños. Faltan obras. La historia es vieja y, por ahora, sólo hay planes para hacer las importantes.

Qué se dijo tras el temporal funcionarios y vecinos, entre los reclamos y las quejas

Con el agua en la vereda, sacó una caña de pescar En Blanco Encalada y Cabildo, vecinos se quejaron con ironía y mucha bronca

Luis Andreotti intendente de san fernando

“El responsable de las obras hidráulicas, que es la provincia de Buenos Aires, actúa muy poco” mArtA cAsAs vecina de la plata

“Es de terror, no se puede vivir así cada vez que llueve. Estamos corriendo de un lado a otro” Andrés cervAntes vecino de vicente lópez

“Caen dos gotas y el agua tapa las veredas y se corta la luz. Macri (Jorge) debe hacer más obras”

la nacion

De pronto, el cielo sobre Retiro estaba tan encapotado que los autos circulaban con las luces encendidas. Eran las 11.30, pero en la Capital se veía poco y nada. En un abrir y cerrar de ojos se hizo de noche. Minutos después se desató el temporal, con intensas lluvias, granizo y mucho viento. Durante varios minutos cayó una cortina de agua que impidió la visibilidad, lo que generó problemas en el tránsito en distintos puntos. Además, para protegerse del granizo, los conductores se detuvieron debajo del puente frente a la Facultad de Derecho, en Avenida del Libertador, lo que ayudó a complicar el tránsito. A la peor hora del temporal, además, varios tramos de Libertador y de Figueroa Alcorta también quedaron bajo el agua, y los bosques de Palermo se transformaron en una suerte de río, con unos pocos islotes de pasto visibles, mientras el resto estaba cubierto por el agua. Cabildo y Blanco Encalada ,como siempre, se inundó y por allí navegó el gomón de los bomberos. Los comerciantes, ya acostumbrados, se habían atrincherado detrás de las compuertas y persianas de metal para intentar detener el agua. Laureano Cortez, dueño de la peluquería UP, en Blanco Encalada 2435, se asomó por encima de su compuerta para tirar una caña de pescar (que

tenía una zapatilla enganchada al anzuelo) al río de agua que pasaba por enfrente de su local. “La idea es decir acá estamos, ante las desgracias, reclamar con un poco de humor”, explicó el peluquero. “Nosotros implementamos una nueva estrategia, tenemos planificado todo como para en cinco minutos acomodar los muebles y la mercadería de modo tal de que no les llegue el agua”, explicó Pablo Rodríguez, encargado de la zapatería Marta Sixto, sobre la avenida Cabildo. Gustavo Acevedo, el presidente de la comuna 13, apareció en los operativos de seguridad de la ciudad y fue increpado por un vecino que se quejaba desesperado, porque todavía no había podido cobrar la indemnización. “No cobramos nada todavía, eso que hicimos todo el trámite, presentamos carpetas y papeles, fuimos a la comuna... y nada, todavía no nos ayudaron”, afirmó Eduardo Lustrón, dueño del local de ropa HRG, en Blanco Encalada 2406. “Te falta presentar un papel todavía”, se excusó Acevedo. “A vos te parece que me digan que me falta un papel, si yo ya presenté todo, pero es un trámite que nunca termina” exclamó, desesperado, Lustrón. “Nosotros nos presentamos para pedir el subsidio con la anteúltima tormenta, pero nunca lo pudimos cobrar, así que ya ni me tomo el trabajo”, Afirmó Hernán Telura, de la óptica D’occhiali, en Blanco Encalada 2480. Desde la Ciudad indicaron que hasta ayer se habían iniciado 26.954 pedidos de subsidios, de los cuales se cobraron 4508. El Gobierno porteño

había prometido pagar los subsidios en 20 días. Las quejas de los vecinos no cesaban. “Lo que más me preocupa es lo rápido que subió el agua esta vez. Por suerte solo llovió fuerte unos minutos, pero si duraba media hora más hubiese sido muy grave”, comentó Eduardo Serra, empleado del maxiquiosco en la esquina de Cabildo y Blanco Encalada. “Yo no pido mucho, ni siquera pido que me ayuden a recuperar mis pérdidas. Lo único que pido es que me cuiden con lo que les corresponde, que se aseguren de levantar las bolsas de basura para que no se tapen las bocas de tormenta, que corten el tránsito cuando vean que se está inundando”, dijo Beatriz Manchino, dueña del local de ropa Hispanic, en Cabildo 2419. En la calle se veían bolsas de basura y cajas flotando en el agua. En la esquina de Roque Pérez y Besares, en Saavedra, la encargada del restaurante Cornelio, Natalia Galaz, dijo que “el agua llegó hasta el cordón de la vereda. La calle se inundó muy rápido y vimos que empezó a salir agua de las alcantarillas, y nos imaginamos que iba a ser más grave. Por suerte la lluvia duró poco y no llegó a ingresar en el local esta vez”. En tanto, en barrio Mitre, otro de los más castigados por la inundación del pasado 2 de abril, Zulli Riveros, mientras sacaba agua del patio de su casa, dijo que “cuando se largó a llover me empezaron a temblar las manos, me agarró una angustia terrible. Desde que perdí todo en la inundación anterior, tengo miedo cada vez que llueve”.ß